OFUNAM Orquesta Filarmónica de la UNAM

Desde hace tiempo, tenía muchas ganas de ir a un concierto, es decir a una sinfónica y poder disfrutar de la música clásica, así como lo hice ese sábado, nada mejor que eso. Me encantaba como el director Jan Latham- Koening se apasionaba tanto por dirigir a las personas, recuerdo que hasta saltaba y no era para menos, teniendo tanta pasión en el instante por lo que provocaban las melodías.

Y no solo el director, también hay que incluir a los trompetistas, chelistas, flautistas, violinistas, entre otros, en lo particular a Suyoen Kim, quien nació en Alemania y lo que más me impresiono, es que ella comenzó a tocar el violín desde los 5 años, donde a sus escasos 16 años empezó a aparecer en conciertos y grabaciones muy importantes en las orquestas de Europa y Corea. Hay que reconocer lo grandes triunfos y su trayectoria que aunque ha sido corta, ha tenido reconocimientos importantes como el Concurso Internacional de violín de Hannover en 2006.

Fue muy bonito ver que tanto ella como el director ponían tanta pasión en su trabajo, así como todos, en la primera parte del concierto para violín (Sibelius), donde la segunda melodía fue la que más me gusto, sintiendo una paz interior en mí, lo cual, no todas las melodías logran en mí, y claro mucho menos canciones que son muy ruidosas que hay en la actualidad, debido a que no han logrado una estructura correcta.

Una de mis parte favoritas, fue la melodía de Tchaikovsky, la sinfonía no.6, es decir, la Patética, que fue muy emotiva e interesante la composición que hace Tchaikovsky, y aún más al saber la historia que encadena la creación de la melodía, sin duda, si hubiera conocido cual fue  el motivo por el cual la hizo, yo creo que me hubiera sentido más en conexión con él, sabiendo por todo lo que atravesó y enfrento. Ya en la parte final, me encantaba mucho el uso de percusiones, a lo cual estaba aún más atenta.

El sonido de los platillos, el tambor y en alguna ocasión el gong, le daban una esencia a la melodía, así como los otros instrumentos, también me gustaba mucho el uso de flautas o lo oboes. Yo creo que de los tipos de instrumento, mis favoritos son todos, pero en especial los de vientos, y sobre todo el piano, me hubiera encontrado que adicionaran un piano, por la elegancia del sonido que produce, aunque no se queda atrás la interpretación del violín.

Es increíble que a un precio de 25 pesos puedas acceder a ver un concierto de esa magnitud y que la mayoría de la gente no lo aproveche. Además, a nosotros nos hace muy bien presenciar este tipo de eventos, ya que no solo tenemos más cultura y gusto por la música clásica, sino que también educamos a nuestro oído, ya que no estamos acostumbrados a oírla por el tipo de música que en la actualidad escuchamos. Pero por mi parte me encanta mucho escuchar melodías que no solo nos relajan, sino que provocan un sentimiento en nosotros.